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Remedios Caseros con Plantas Naturales para Enfermedades
Por medio del siguiente articulo, vamos a bordar todo lo relacionado con los remedios caseros a partir de plantas naturales que se pueden preparar desde el hogar, que gracias a sus propiedades curativas sirven para aliviar o combatir diferentes enfermedades y como una alternativa ante la medicina convencional.
Qué son los Remedios Caseros
Son aquellas técnicas utilizadas desde el hogar a partir de las plantas naturales que nos brinda el medio ambiente y que cuentan con propiedades muy efectivas para hacer frente a problemas de salud en el cuerpo humano.
Propiedades de los Remedios Caseros
Sin duda alguna, que la plantas que se obtienen de los elementos de la naturaleza poseen propiedades medicinales para prevenir, tratar y combatir todo tipo de dolor o enfermedad.
La hoja de laurel es conocida por ser buena para la salud. Ya que esta actúa contra muchas enfermedades, como el cáncer, además ayuda a desintoxicar el cuerpo. Esta hoja es un gran protector contra las infecciones bacterianas, detiene el envejecimiento, acelera la cicatrización de heridas y ayuda a controlar los niveles de azúcar en sangre. También mejora la salud del corazón, cura problemas respiratorios, reduce las inflamaciones y acelera la digestión.
El laurel es una planta medicinal y aromática popular desde hace muchos años. Tal y como afirma este estudio realizado por la Cumhuriyet University, es un potente antiinflamatorio y analgésico.
Se cree que cuenta con sustancias de acción diurética que estimularían la expulsión de los líquidos retenidos en los tejidos del cuerpo. Sin embargo, no existen evidencias científicas que avalen dicha afirmación.
Lo que sí es cierto es que el laurel también combate la diarrea, tal y como afirma este estudio realizado por la Al-Balqa Applied University (Jordania), lo que resulta muy beneficioso para nuestro bienestar.
Ingredientes
5 vasos de agua (1 l).
1 cucharadita canela en polvo (5 g).
6 hojas de laurel.
1 cucharada de miel (25 g) (opcional).
Preparación
Poner a hervir el litro de agua y, cuando llegue ebullición, agregarle la cucharadita de canela y las hojas de laurel.
Bajar el fuego y permitir que se realice la decocción durante 5 minutos.
Pasado este tiempo, retirarlos del fuego y esperar que repose a una temperatura ambiente.
Una vez esté apto para el consumo, pasarlo por un colador y servir un vaso.
Iniciar la toma en ayunas y distribuir el restante para el resto del día.
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